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martes, 1 de diciembre de 2015

El bosque



Centro crepúsculo. 
El aire 
manos casi separadas 
tan grueso e impenetrable. 
ANDA. No deje huellas 
de sus pies. Cientos de árboles 
contienen la respiración en su 
cabeza. Un pájaro no sabe 
que estás ahí, y lanza su silbato 
de largo a través del paisaje. 
El mundo cambia de color: es como un eco 
mundial. Eco ahora 
cruzar agitar 
las últimas fronteras de la tarde.

domingo, 1 de noviembre de 2015

OTOÑO!



                                                          LAS HOJAS DE OTOÑO

Las hojas de otoño
el viento las lleva.
¡Qué viaje amarillo!
¡Qué alfombra ligera!
Yo voy por la calle
dorada y serena
y cruje el otoño
con voz de hojas secas.

Graciela Genta

domingo, 20 de septiembre de 2015

Bailarina




Tú vienes, tan ligera

como el ángel que va de rayo en rayo

de sol sobre la hierba,

que apenas si se entera

cuando ya fue y no está ni en es ni en era.

¿Y no te vi otra vez

viniendo así, aunque entonces bien distinta?

¿O será que tal vez

misma joven pinta

su propia luz y siendo ya es distinta?

¿Qué sabemos los viejos

de tan dulce, fugaz advenimiento?


¿Quedó todo tan lejos

apenas un momento

cruza tu aroma en el temblor del viento?



Antonio Deltoro

martes, 8 de septiembre de 2015

La playa)



La playa desierta parece; 
Las olas serenas 
Salpican apenas 
Su dique de arenas, 

Con blando rumor. 
Del líquido seno la Luna 
Su pálida frente 
Allá en Occidente 

Comienza a elevar. 
no hay nube que vele importuna 
Sus tibios reflejos, 
Que miro de lejos 

Mecerse en espejos 
Del trémulo mar. 

Gertrudis Gòmez De Avellaneda

martes, 28 de julio de 2015

Paísaje mediterranéo




Soledad.

En ti estás todo, mar, y sin embargo, 
qué sin ti estás, qué solo, 
qué lejos, siempre, de ti mismo! 
Abierto en mil heridas, cada instante, 
cual mi frente, 
tus olas van, como mis pensamientos, 
y vienen, van y vienen, 
besándose, apartándose, 
en un eterno conocerse, 
mar, y desconocerse. 
Eres tú, y no lo sabes, 
tu corazón te late y no lo siente... 
¡Qué plenitud de soledad, mar sólo!

(Juan Ramón Jimenéz )

miércoles, 24 de junio de 2015

Paisaje de montaña



La tinta verde crea jardines, selvas, prados, 
follajes donde cantan las letras, 
palabras que son árboles, 
frases que son verdes constelaciones. 

Deja que mis palabras, oh blanca, desciendan y te cubran 
como una lluvia de hojas a un campo de nieve, 
como la yedra a la estatua, 
como la tinta a esta página. 

Brazos, cintura, cuello, senos, 
la frente pura como el mar, 
la nuca de bosque en otoño, 
los dientes que muerden una brizna de yerba. 

Tu cuerpo se constela de signos verdes 
como el cuerpo del árbol de renuevos. 
No te importe tanta pequeña cicatriz luminosa: 
mira al cielo y su verde tatuaje de estrellas.
Octavio Paz

viernes, 29 de mayo de 2015

Patio andaluz.



Esperando que el viento
Doble sus ramas
Que el nivel de las aguas
Llegue a tu arena
Esperando que el cielo
Forme tu barro
Y que a tus pies la tierra
Se mueva sola
Pueblo
Estas quieto
Como no sabes
Como no sabes todavía
Que eres el viento
La marea
Que eres la lluvia
El terremoto.

Mario Benedetti

domingo, 10 de mayo de 2015

Marina

  • Marinero en tierra
  • Si mi voz muriera en tierra
  • Llevarla al nivel del mar
  • Y nombrarla capitana
  • De un barco bajel de guerra,

  • Mi pueblo tiene castillos
  • Pero además una mar
  • Un mar de añil y grande,
  • Mi amor, donde guerrear.

  • Rafael Alberti.

viernes, 24 de abril de 2015

Paisaje ,


Voy camino de la tarde 
Entre flores de la huerta, 
Dejando sobre el camino 
El agua de mi tristeza. 
En el monte solitario 
Un cementerio de aldea 
Parece un campo sembrado 
Con granos de calaveras. 
Y han florecido cipreses 
Como gigantes cabezas 
Que con órbitas vacías 
Y verdosas cabelleras 
Pensativos y dolientes 
El horizonte contemplan. 

¡Abril divino, que vienes 
Cargado de sol y esencias 
Llena con nidos de oro 
Las floridas calaveras!



Federíco garcía Lorca.

domingo, 29 de marzo de 2015

Paisaje marino


Mar distante.

Si no es el mar, sí es su imagen,
su estampa, vuelta, en el cielo.

Si no es el mar, sí es su voz 
delgada, 
a través del ancho mundo, 
en altavoz, por los aires. 

Si no es el mar, sí es su nombre 
es un idioma sin labios, 
sin pueblo, 
sin más palabra que ésta: 
mar. 

Si no es el mar, sí es su idea 
de fuego, insondable, limpia; 
y yo, 
ardiendo, ahogándome en ella.

(Pedro Salinas)

viernes, 27 de febrero de 2015

PAISAJE



Abeja blanca zumbas (ebria de miel) en mi alma 
y te tuerces en lentas espirales de humo. 

Soy el desesperado, la palabra sin ecos, 
el que lo perdió todo, y el que todo lo tuvo. 

Última amarra, cruje en ti mi ansiedad última. 
En mi tierra desierta eres la última rosa. 

Ah silenciosa! 

Cierra tus ojos profundos. Allí aletea la noche. 
Ah desnuda tu cuerpo de estatua temerosa. 

Tienes ojos profundos donde la noche alea. 
Frescos brazos de flor y regazo de rosa. 

Se parecen tus senos a los caracoles blancos. 
Ha venido a dormirse en tu vientre una mariposa de sombra. 

Ah silenciosa!

Pablo Neruda)

sábado, 31 de enero de 2015

Mi calle


Vamos subiendo la cuesta
que arriba mi calle
se vistió de fiesta.

Hoy el noble y el villano,
el prohombre y el gusano
bailan y se dan la mano
sin importarles la facha.

Juntos los encuentra el sol
a la sombra de un farol
empapados en alcohol
abrazando a una muchacha.

Y con la resaca a cuestas
vuelve el pobre a su pobreza,
vuelve el rico a su riqueza
y el señor cura a sus misas.

Se despertó el bien y el mal
la pobre vuelve al portal,
la rica vuelve al rosal,
y el avaro a las divisas.

Se acabó,
el sol nos dice que llegó el final,
por una noche se olvidó
que cada uno es cada cual.

Vamos bajando la cuesta
que arriba en mi calle
se acabó la fiesta

(Joan Manuel Serrat )

jueves, 8 de enero de 2015

VIÑEDO


En estos campos de la tierra mía, 
y extranjero en los campos de mi tierra 
—yo tuve patria donde corre el Duero 
por entre grises peñas 
y fantasmas de viejos entinares, 
allá en Castilla, mística y guerrera; 
Castilla la gentil, humilde y brava; 
Castilla del desdén y de la fuerza—, 
en estos campos de mi Andalucía, 
¡oh tierra en que nací! , cantar quisiera. 
Tengo recuerdos de mi infancia, tengo 
imágenes de luz y de palmeras, 
y en una gloria de oro, 
de lueñes campanarios con cigüeñas, 
de ciudades con calles sin mujeres, 
bajo un cielo de añil, plazas desiertas 
donde crecen naranjos encendidos 
con sus frutas redondas y bermejas;
y en un huerto sombrío, el limonero 
de ramas polvorientas
 Antonio Machado.